En nuestros años mozos el “Twist”
era un baile muy popular en los guateques, en el cual bajabas flexionando las
piernas todo lo que podías hasta casi rozar el suelo con el trasero, y todo
ello moviendo la cintura. La chica, que solía llevar minifalda, hacía lo mismo
y podías ver bien sus piernas, con la natural alegría. Un buen invento
americano.
Nota del editor: Manolo haciendo estragos en un guateque |
Pero en moderna economía es una
cosa bien distinta, según nos estamos enterando. Consiste en quitarse de encima
la deuda soberana a corto plazo y pasarla a largo plazo, sin invertir nada de
dinero. Este peligroso baile, pues supone endeudar a nuestros nietos, parece
que tiene muchos adeptos en la FED estadounidense, y según los expertos sus efectos
a largo plazo son poco menos que letales. Vamos que se quitan la deuda de hoy y
que paguen dentro de 30 años los que vengan detrás.
Si entramos en nuestra querida
España, hoy nos sorprenden dos consultoras con sus dos informes (cada uno
cuesta un millón de euros al contribuyente), en los cuales no nos dicen nada
nuevo. Los bancos y cajas españoles, necesitan 62.000 millones para subsistir.
Ya lo sabíamos hasta los más tontos, sin necesidad de pagar ese dineral.
¿Hay responsables de este
desastre?. No. ¿Va a ir alguien a la cárcel?. No.
En este País si robas una barra
de pan para comer irás seguramente a la cárcel. Pero si robas 100 millones ni
te echarán de tu puesto, ni por supuesto devuelves nada.
Todos sospechamos que ese dinero
ha sido detraído por políticos y banqueros, a un pueblo al que han dejado como
premio en recesión y paro permanentes.
¿Habrá alguna reacción?. Mucho me
temo que ninguna. Ya somos una manada de resignados borreguitos, camino del
matadero, hábilmente conducidos por políticos de cualquier signo y banqueros
voraces (ya que las ideologías no existen, salvo la universal de llenarse los
bolsillos con dinero ajeno).
Y mientras los sesudos Premios
Nobel en economía, siguen dando vueltas a si bailar más “Twist”, imprimir más
billetes, o rescatar a más países. Todo un turbio panorama. A nosotros ya el
“Twist” nos queda lejos, pero creo que nuestros hijos y nietos van a tener que
bailar mucho “Twist” y puede que rock y hasta la yenka.
La sabiduría popular define esto como 'el que venga detrás, que arrée'. No será la primera herencia con dientes que ha de gestionar una generación, bien a su pesar. A nosotros nos tocó, por si se os ha olvidado, la 'Unidad de Destino en lo Universal'. Puestos a elegir, el dinero tiende a ser más maleable que las dictaduras.
ResponderEliminarAlfonso
Si aquello de la Unidad de Destino en lo universal, era un galimatías que nunca entendí. Creo que ni José Antonio lo entendía. También se decía "Amamos a España porque no nos gusta".
EliminarPero aquella dictadura, no se lo que hacía y como lo hacía, que no emitía deuda pública (no existía), y en ella trabajaba todo el mundo y se hacían pantanos con unos impuestos bajísimos (los salarios también eran ridículos) y se inventó la Seguridad Social. Y la ayuda exterior salvo la leche en polvo no bebible y el queso rancio no existía. No había euros si no roñosas pesetas.... y el PIB subía cada año.
Siempre me he preguntado que mago de las finanzas tenía D. Francisco para conseguir tales virgerías. Que nos den la receta ahora. Igual era un precursor...
Y soy anti-franquista pero ahí está el detalle.
Pues sí que te descarrila la memoria. Hacia 1958 la situación era de ruina. Había deuda pública, ya lo creo que la había (buena parte en manos de D Joan March), al punto que la situación era de bancarrota total. De ahí el Plan de Estabilización del 59, y de ahí la inmediata emigración masiva hacia la desdeñosa Europa. Cientos de miles (o varios millones; según fuentes) de españolitos incultos espurreados por Europs, buscándose la vida, consiguiendo curros asquerosos (lo que ni los turcos querían aceptar) pero saliendo adelante, al punto que gracias a las 'remesas' que enviaban a sus casas, más el incipiente turismo, el ministro Martín Artajo logró equilibrar las cuentas (las que se hacían en divisas). Diez años después el 80%, más o menos, había regresado, pero un 20% se quedaron en Alemania, Suiza, Austria, Holanda, Francia o el UK, y no sé si a su pesar dejaron de ser españoles. Sus hijos, de modo unánime, jamás lo han sido. Nunca quisieron saber nada del país que tan cruelmente expulsó a sus padres, no por medio de la violencia expresa, sino por hambre. Me temo que la visión idílica que tienes de la economía del Régimen, Manolo, se compadece muy mal con la que pude ver en 1967 en el ghetto hispano de Wiesbaden. Comparado con eso, el que dejemos a nuestros desempleados descendientes una deuda del copón tampoco es tan grave. Siempre les quedará lo que a sus ancestros, el irse a otros mundos. Después de todo, Spanien siempre ha sido un paía de emigración. Quizá el haberse vuelto uno de inmigración, a consecuencia del ladrillo y del 'papeles para todos' de los progres insensatos, es la causa de que hoy disfrutemos cinco millones de parados. Un número que coincide peligrosamente con el de casi cinco millones de 'venid, que hay curro inagotable y papeles para todos'. Da que pensar, ¿verdad?
ResponderEliminarAlfonso el Incómodo
Pues si Alfonso. Algo me suena del plan de estabilización (¿Era de Laureano López Rodó?). En efecto emigraron millones, fundamentalmente del campo (los abuelos de mi mujer, por ejemplo). Y las cuentas se equilibraban con el dinero de emigrantes y el turismo.
Eliminar¿Pero de donde salió el dinero para obras públicas?. No lo se.
No estoy de acuerdo con lo de la deuda pública. Lo de March era un préstamo, pero la Deuda como ahora la conocemos no existía. Mira los periódicos de la época y lo verificarás. Fue un invento de la transición.
Yo tenía entendido que 'la deuda' significaba que te habían concedido un préstamo y lo tenías que devolver. Si es otra cosa, nos lo expliques, plis.
EliminarEso aparte, la deuda soberana tramitada como tal ya existía en los tiempos de Bonaparte, al punto que la primera sorpresa con que se dió el gobierno Talleyrand en julio de 1815 fue encontrar empréstitos por valor de mil quinientos millones de francos (una verdadera burrada) concedidos a la Francia de Bonaparte para que hiciera frente a la VII Coalición. Al tiempo, el gobierno de Lord Liverpool estaba empantanado en otra deduda soberana, por valor de 700 millones de libras, que debía gracias a 25 años de guerra con el Corso. Como verás, la Deuda Pública está lejos de ser un invento de la (históricamente despreciable) Transición Española. De hecho, el primer apunte contable de 'deuda soberana española' que recuerdo lo firmaba el Ministro Mendizábal, al pie de un inmenso documento, tamaño A3, que durante muchos años colgó en el despacho del Subdirector General de la Deuda Pública, un buen cliente mío de los primeros 70's. En fin, que deberías revisar tus fuentes.
Alfonso el Puñetero
Laureano López Rodó era el Ministro Comisario del Plan de Desarrollo. Miembro notorio del Opus Dei, quizá fuera el ideólogo del Plan de Estabilización (pienso que no; el verdadero 'ideólogo', a mi humilde juicio, fue el Presidente de la Reserva Federal Americana; no te olvides de que por entonces quien mandaba en España no era Franco: era Eisenhower). Ahora, el encargado de cuadrar las cuentas y responsable último de pagar las facturas, era el Ministro de Hacienda; me suena que a la sazón era Alberto Martín Artajo, pero también me suena su nombre de ciertos documentos que llevan su firma, de tipo Tratado Internacional, firmados en 1946, de modo que igual es otro (estoy demasiado vago para ponerme a buscar nombres).
EliminarAlfonso el Perezoso
No os fiéis demasiado de lo que "cuentan" los periódicos... Ni de los de antes ni de los de ahora...
ResponderEliminarA mi me tenéis aco...j y acomp...j.
ResponderEliminarSois unos absolutos estudiosos e investigadores. ¡Y yo que me creia mas o menos informado!. ¡ Hay que tener memoria, ganas de buscar y ganas de saber para volver la mirada atras y sacar tiempo, trabajando, para ello !
¡ Que no va de coña !. Me parece importante el tema y vuestra erudición. Favor continuar.
Respecto a la deuda que se pueden encontrar nuestros nietos, tendrán que buscar la manera de sortearla. Creo firmemente que se acerca, o ya estamos, un cambio de ciclo histórico y social y que las sociedades emergentes, África entre otras, tendrá que salir de su situación actual, lo que pasa es que no adivino el como.
Angel.
Puestos a sospechar, todo lo que está pasando parece que está siguiendo un plan preconcebido. Una vez que se destapa el agujero de Bankia y los mercados se ponen a reaccionar, hay intereses creados para que se arme el follón; cuanto más suba la prima de riesgo, más suben los intereses y alguien se forra.- Y con la bolsa, lo mismo; la curva es predecible, ya que a ciertas acciones hay reacciones “de libro” y alguien más se está forrando.
ResponderEliminarAlguien pone un coto de préstamo máximo y todo el mundo piensa que se excederá, con lo que la temperatura sube; entonces llegan los buenos auditores que declaran que con bastante menos nos apañamos. ¡Pero qué buenos son! Y la bolsa se recupera: a vender.- Y luego se señalan vaguedades, se siembra un poquito de intranquilidad, y ¡hala! A comprar.
Es como Ben-Hur y su cuádriga: con una mano tira de un lado (prima), con la boca maneja la bolsa y con la mano libre fustiga a los Mesalas que somos todos nosotros. Y entretanto, los caballos a punto de desbocarse…
Y no acaba aquí. Es para sospechar que haya más acuerdos inconfesables para manejar todo este mecanismo y que todo esté orquestado; de ahí la importancia del twist: hay que saber seguir la música y tener cintura para seguir el ritmo y evitar que nos toque de lleno.
Pero a nuestros años ya no tenemos la misma cintura. Ya no tiene gracia. Y vamos a tener que enseñar twist a nuestros hijos y nietos, ya que esto de los planes preconcebidos ha existido, existe y seguirá existiendo. A ver si somos capaces de ponerles sobre aviso...
Pues como la última de tus profecías sea cierta me voy a llevar un disgusto. Es que jamás, ni de jovencito, supe bailar el TWIST. No sólo eso: es que me parecía de mariquitas. Mi punto de vista iba más allá de lo sencillo, casi cayendo en lo selvático: uno baila para palpar, tantear y achuchar (cualquier otra explicación es mera hipocresía, cuando no simple justificación de la propia incompetencia). Si no hay nada de todo eso, si sólo es hacer el capullo a un metro de la que te mira como si no existieras, ¿para qué carallu sirve? De ahí que no me esforzara lo más mínimo en aprender los ritmos de moda. La verdad, lo veo ahora con cierta sorpresa, es que nunca me hizo falta (se ligaba mucho más sin hacer el chorra, sobre todo si tenías coche, aunque fuera un humilde 600, y no andabas demasiado mal de pasta; de hecho, con eso y sabiendo reírte de ti mismo, llegabas mucho más lejos en materia de abatir Barricàdes Mysterieuses que los bailones de plantilla).
EliminarEl Plan de Estabilización de 1959 se debió a Joan Sardá i Dexeus y Enrique Fuentes Quintana, fue el final del periodo autárquico. El Ministro de Hacienda era Mariano Navarro Rubio, Martín Artajo fue Ministro de Asuntos Exteriores.
ResponderEliminarLas principales medidas fueron:
Se anuncia la convertibilidad de la peseta y la elevación del tipo de cambio con el dólar desde 42 hasta 60 pesetas, con el objetivo de dar estabilidad a la peseta. Esto fue acompañado de cuantiosos créditos del exterior de los organismos internacionales y del propio gobierno norteamericano.
Elevación de los tipos de interés, limitación de la concesión de créditos bancarios y congelación de salarios, todo ello con el objetivo de tratar de reducir la inflación existente. Con el mismo objetivo se había cerrado en diciembre de 1958 la puerta a la pignoración automática de la deuda pública en el Banco de España, que había constituido otra de las fuentes inflacionistas.
Fomento de la inversión extranjera con una nueva legislación sobre inversiones exteriores que permitía la participación de capitales extranjeros en empresas españolas.
Con el objetivo de limitar el déficit público se propone una reforma fiscal que incremente la recaudación y una limitación del gasto público.
Así da gusto. Da gloria conversar con gente que sabe de lo que habla. Muchas gracias, José Luis.
EliminarAlfonso
Un inciso (porque los comentarios son impecables): no se puede hablar de la crisis de "la Banca" y meter en el mismo saco a las cajas de ahorro nacionalizadas, politizadas y por eso quebradas, y a los bancos serios (pocos, pero grandes), que no necesitan ayuda y que tienen más de la mitad de su negocio fuera de España.
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