He pasado otra vez por este puente,
Que en el último invierno tiró el río,
Cortando así el camino, sin
bajío,
Ni paso o vado que el viajero intente.
Hoy, ya arreglado y burlado el
torrente,
Travesaños nuevos llenan el vacío
Que un día derribó el ímpetu bravío
De la ciénaga, oscura e inclemente.
Semejante me parece a este puente
La vida, siempre contra la corriente,
Perdiendo cada invierno alguna tabla.
Mas cada primavera tiene enfrente,
El ímpetu incansable de la gente,
Que ordena su destino a rajatabla.
Sin duda, el primero que cruzó el puente fue el zorro aquel que buscaba la ternura de su humano amigo, su humano amigo, que le dedicó otro poema, esta vez inspirado en su sensibilidad para entender incluso los sentimientos de los animales.
ResponderEliminarEl idioma ruso y la medida del tiempo de los rusos:
ResponderEliminar¡Cuanto tiempo! = Сколько зим, сколько лет! (¡Cuantos inviernos, cuantos años!)
En el río de la vida,
ResponderEliminarla tabla está renuente
pero el tiempo y la fatiga
hacen que se resiente
Cruje que te cruje
Pisa que te pisa
al final sin cortapisa
el puente que se hunde
Sea por estática
Sea por fatiga
El caso es, mi amigo,
Que el río se ha tragado
Nuestra tabla salvadora
Y sin pausa y sin demora
Un nuevo puente
Hay que hacer ahora
(se ve que a los de ciencias no se nos da muy bien esto de las poesías, así que pido humildemnente perdón por tamaño atrevimiento)