... por ROSA MARÍA MURO Y MANOLO RINCÓN
Monseñor Gabino López Morant.
Profesor de Religión del INEM “Ramiro de Maeztu”. Su labor pedagógica
se inició durante la Segunda República Española como Profesor de Religión,
Deberes Éticos y Cívicos y Rudimentos de Derecho. Fue miembro del Claustro de profesores
del Centro desde su fundación (como está documentado en el Libro de Actas de
Tomas de Posesión) hasta 1973, fecha de su jubilación voluntaria. A lo largo de
su trayectoria docente siempre ejerció como Jefe del Seminario de Religión.
La Religión en los primeros 25 años del
Instituto (1.939-64).
El Padre Gabino cubrió una parte muy importante de la vida del
Instituto desde su fundación en 1.939 hasta los años 70. Él nos ha legado en
varios de sus escritos las vicisitudes que vivieron quienes pusieron en
funcionamiento el Instituto a partir del momento de su creación y que aportan a
nuestro juicio muchos datos de interés. El objeto de este trabajo es darlos a
conocer. Dada su extensión comenzamos por los dos primeros cursos de la
Historia del Ramiro, que él vivió con intensidad.
Nombrado profesor de Religión del Instituto el 25 de mayo del año 1.939
nos ha dejado en unas interesantes memorias gran cantidad de datos sobre la organización
de su asignatura y sus experiencias personales en el Ramiro, que nos parecen de
gran valor histórico para comprender aquellos años iniciales del Centro, en los
cuales y según la idiosincrasia de la época la Religión era fundamental para la
formación de los alumnos.
Escribe en el capítulo inicial titulado “Un poco de Prehistoria” que
fue nombrado profesor de Religión por el entonces Ministro de Educación
Nacional Sr. Sainz Rodríguez (al que él cita como Conde de Rodezno). Recuerda
que el inicio de aquel curso tuvo lugar en noviembre, en lo que había sido una
cárcel de mujeres hasta finales de octubre de dicho año, que fue trasladada a
las Comendadoras de Santiago. Antes de que se realizase este traslado bautizó
en el verano a los hijos de aquellas reclusas. Era el edificio que
posteriormente fue reformado y ampliado para convertirse en el Internado del
Instituto “Residencia Generalísimo Franco”.
Comienza el curso 39-40 el
22 de noviembre, con siete cursos de bachillerato, que se distribuyeron en dos
niveles, uno en horario matutino para alumnos que por causa de la Guerra iban
retrasados y otro por la tarde para los de edad normal de estudios. El adjunto
del Padre Gabino, era el Padre D. Emilio Guardiola García, nombrado por el
obispado, que se encargaba del grupo vespertino.
En los encabezamientos de ambas Memorias hace referencia a los
trabajos realizados en la “Cátedra de Religión del Instituto”. Además, se citan
sus profesores, la enseñanza de la materia, horario, exámenes, dirección
espiritual y prácticas piadosas, así como las celebraciones religiosas en el Centro.
El curso empezó retrasado por múltiples razones:
1.
Había zonas ocupadas por fuerzas de aviación del ejército nacional,
éstas tardaron tiempo en marcharse y en desalojar los locales del Instituto-Escuela,
que eran los que se iban a utilizar como aulas.
2.
Los edificios se encontraban en una situación lastimosa y hubieron de
ser remodelados por lo que cambió su fisonomía. También existían otras
dependencias en construcción.
Por estas razones se refiere a
ese curso como “anormal”.
De sus escritos se desprende que el nivel de conocimientos religiosos
era muy bajo en el alumnado de la época, lo que él atribuye a un conjunto de
causas que deben entenderse teniendo en cuenta el contexto histórico de
entonces.
De esta forma y sin unos textos definidos, comenzó a impartir sus
clases, siendo nombrado además Director Espiritual del Centro. A mediados del
curso se decantó para la enseñanza de la materia por los textos religiosos del Doctor Ruano
Ramos.
Señala que el deteriorado material pedagógico procedente del
Instituto-Escuela tuvo que ser sacado de su almacenaje e instalado de nuevo.
Los suspensos en la asignatura fueron numerosos en ambos niveles de
enseñanza que llegaron al 50% en el
primer curso. Por el contrario en el séptimo no hubo suspensos. Como nota
curiosa comenta que no dejó a ningún alumno sólo con la Religión, sino a aquellos
que tenían más suspensos.
Entre las prácticas religiosas de este primer año se celebraron:
ejercicios espirituales; festividad de Santo Tomás de Aquino en la que tuvo
lugar un torneo de poesía religiosa al que se presentaron más de 40 trabajos;
se organizó también un partido de fútbol con otro colegio que ganó el Ramiro.
Relata curiosas anécdotas:
-
Cuatro alumnos de cursos superiores se negaron a entrar en clase de
religión y a frecuentar sacramentos. La junta de profesores decidió suspenderlos
en varias asignaturas para evitar que volviesen al curso siguiente.
-
Había ya alumnos musulmanes en el Internado Hispano-Marroquí. Algunos de
sus compañeros internos, llevados por un exceso de celo religioso, cogieron a
un “morito” y le echaron agua con la idea de bautizarle.
-
A finales del curso y en parte gracias a una pequeña donación de la
embajada alemana se pudo instalar la capilla en la actual “Sala de Visitas”. Se
destinaron 5 mil pts. para objetos de culto porque, una dificultad que señala,
era la falta de la capilla, lo que imposibilitaba la celebración de la misa y
la administración de sacramentos en el Centro. De ahí el interés del Padre
Gabino en obtener fondos para poder dotarla de los elementos precisos para
realizar su función.
El curso 1.940-41 arranca con la inauguración de la citada Capilla el
11 de noviembre. Asistió el Ministro de Educación Nacional. Se celebró una Misa
Solemne de Espíritu Santo. Con este motivo el Museo Arqueológico cedió al
Instituto el retablo del barroco aragonés en el cual estaba la imagen de la Virgen.
Cuando concluyó la construcción de la Iglesia del Espíritu Santo,
promovida por el Instituto y el CSIC, en lo que había sido el Auditorio de la
Residencia de Estudiantes, este retablo se instaló en la capilla anexa a la
nave central. (En relación con este tema queremos hacer referencia a un escrito
de D. José Navarro Latorre dirigido al Presidente del CSIC, en el que señala
que la Iglesia fue un proyecto conjunto entre el Instituto y el CSIC, para ser
utilizada por ambas instituciones).
Establecida la normalidad académica en el Centro, en la Cátedra de
Religión cada uno de los dos profesores de la asignatura impartían 14 horas
lectivas, preferentemente en horario vespertino, en el que también tenían lugar
otras enseñanzas como dibujo, música y lenguas vivas.
Los textos continúan siendo para los tres primeros años los del Dr.
Ruano y para el resto los del Padre Incio García.
Los exámenes eran trimestrales. Durante las vacaciones de Navidad y
Semana Santa los alumnos debían de realizar trabajos monográficos, con el
objetivo de que tuvieran “una ocupación santa y provechosa” en esos días.
Se mantuvo el certamen literario con motivo de Santo Tomás de Aquino.
Las prácticas piadosas que se realizaban en el Centro, eran la Santa
Misa, la administración de sacramentos, la predicación, el rezo del santo
rosario, la dirección espiritual y los Ejercicios Espirituales, que tenían
lugar en la Semana de Pasión.
En aquellos años era costumbre izar la
bandera nacional antes de misa y se arriaba al terminar las clases por la
tarde.
Además de las clases de Religión y la dirección espiritual de los
alumnos el Padre Gabino ha dejado recogidas en sus memorias otras ideas:
- Crear una Congregación religiosa para los alumnos, que finalmente
denominaba Congregación de la Inmaculada y los Santos Niños Justo y
Pastor. El objetivo que perseguía era “formar una minoría selecta que
puedan ser el día de mañana directivos de Acción Católica o cargos de
confianza de la Jerarquía Eclesiástica”. Las reuniones se celebraban los
sábados por la tarde, atendidas por él y por el Padre Guardiola. Este
Padre pasó a residir en una habitación del Internado “Hispano-Marroquí”. Este
sacerdote debía de atender a la vida religiosa de sus internos. Ensalza la
labor realizada por él.
2.
Miembros de este grupo deberían formar parte del SEU (Sindicato
Español Universitario) con el objetivo de cristianizarlo, ya que él lo considera
“laico y pernicioso”.
En este curso 40-41, se fundó
la Escuela Preparatoria del Instituto,
integrada por siete secciones. Nos indica que el Director era el Sr. Canto y el
Secretario el Sr. Crespo.
El Vicario General Don Casimiro Morcillo muestra su interés por la
marcha de la enseñanza religiosa en el Instituto y da aliento al Director del
Instituto, que con su capacidad de trabajo está creando un centro modelo,
referente en España y el Extranjero, de lo cual el Padre Gabino nos ha dejado
constancia en sus escritos.
El Instituto Ramiro de Maeztu se iba consolidando como Instituto
Modelo y Piloto, por sus originales métodos de enseñanza, disciplina,
Internados, formación religiosa y cívica.
Dirección
Espiritual.
Después de una primera época en la que esta responsabilidad fue
ejercida por el Padre Gabino, se nombró un nuevo Director Espiritual del
Instituto, R.P. José María Aguilar. Tras él llegó el Reverendo Sr. D. Evaristo
Felíu, sacerdote secular, Consiliario Nacional de los Jóvenes de Acción
Católica. Logró que se estableciera en el Instituto un Centro Interno de Acción
Católica.
Tras su cese, la dirección espiritual recayó en R.P. Eduardo Granda de
la Compañía de Jesús. Él fundó la Congregación Mariana. Hay que destacar que
consiguió que en la capilla del Instituto hubiese una imagen de la Virgen
María, obra del escultor Vicent Benavente, sufragada por las familias de los
alumnos.
En 1.960 el Sr. Obispo nombra otro Director Espiritual, el Reverendo
Sr. D. Fidel García Cuellar.
La enseñanza
Religiosa.
Con estos nombramientos quedó separada la Dirección Espiritual del
Centro de la enseñanza de la Religión. D. Luis Ortiz Muñoz en aquellos momentos
era Director General de Enseñanza Media y lo fue durante doce años.
Al profesorado que impartió esta enseñanza, además del ya citado
Numerario D. Gabino López Morant y el
Adjunto D. Emilio Guardiola García, se sumaron los Reverendos Srs. D. Agustín
Fernández Rodríguez, D. Juan Tena Ávila, D. Gregorio Pérez San José y D. Germán
López Losada.
En la didáctica de la disciplina fueron de gran utilidad las visitas
al Museo Religioso para conocer la Historia de la Iglesia y la Vida de Jesús.
En último lugar queremos hacer referencia a los libros de texto
empleados a partir del plan 53, para el bachillerato elemental y el superior,
que fueron escritos por el Padre Gabino y comprenden materias que van desde el
Mesías Prometido al Dogma Católico.
Las anécdotas, lamentables.
ResponderEliminarPues así se escribió la Historia José Luis
EliminarHablando de anécdotas y, aunque ya es conocida, quiero reiterar la mía. El P. Gabino me permitió quedarme sin problemas en 1º y 2º a sus clases de religión, aunque sabía perfectamente que yo era protestante. La cosa funcionó bien hasta 3º, cuando se hablaba en el libro de la "herejía protestante" y Lutero no salía muy bien parado. Me puse de un color cárdeno subido cuando muchos de la clase me miraron de forma un poco "extraña" y no tuve más remedio que marcharme; recuerdo la cara de pena del P. Gabino que no debió encontrar en aquél momento una razón convincente para que me quedase, intención que siempre le agradecí.
EliminarEs curioso que la palabra "hereje" ha perdido hoy en día todo su significado; será que ha sido reemplazada por la de "infiel", más en "vigor" que antaño... Esto también es evolución de la historia...
Monseñor Gabino lo tenía fácil, ¡cambiar en "su texto" el comentario sobre Lutero!. Simplemente, practicar "la caridad" católica.
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